y los envió por delante...
a todas las ciudades y sitios a donde ÉL había de ir...'
(Lc 10,1)

¿Qué espera el Papa en el Año de la fe?

Alejandra María Sosa Elízaga*

Año de la fe
Conoce, celebra, fortalece, comunica tu fe
Serie sobre el Credo:
Ficha 3

El Papa Benedicto XVI te escribió una carta, ¿ya la leíste?

En ella te explica por qué decidió convocar al Año de la Fe.

La dividió en quince partes para que te sea más fácil abordarla y comentarla con otros.

Aquí se te presenta un brevísimo resumen, para que te des una idea de qué trata, y luego te animes a leerla completa. Puedes comprarla en alguna librería religiosa, leerla gratuitamente en internet (click aquí), o pedirle a alguien que te la imprima (abarca aproximadamente ocho páginas).

  1. Empieza afirmando que la puerta de la fe “está siempre abierta para nosotros”, que quien la atraviesa comienza un camino que va del Bautismo a la vida eterna, y que creer en la Trinidad (Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo) es “creer en un solo Dios que es Amor”. 
     
  2. Recuerda el Papa que desde que inició su ministerio ha planteado que la Iglesia debe “rescatar a los hombres del desierto y conducirlos al lugar de la vida, hacia la amistad con el Hijo de Dios”. Hace notar que a diferencia de lo ocurrido en el pasado, hoy muchas personas sufren una crisis de fe. 
     
  3. Plantea que “debemos descubrir de nuevo el gusto de alimentarnos con la Palabra de Dios, transmitida fielmente por la Iglesia, y el Pan de la vida, ofrecido como sustento a todos los que son sus discípulos”, y afirma que creer en Jesucristo es “el camino para poder llegar de modo definitivo a la salvación”.
     
  4. Explica el Papa que al convocar al Año de la fe, quiso que su inicio, el 11 de octubre de 2012, coincidiera con el cincuenta aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II, y con el veinte aniversario de la publicación del Catecismo de la Iglesia Católica, y que culminara el día de la solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo, el 24 de noviembre de 2013.
    Así mismo anuncia que convocó a un Sínodo de Obispos, para tratar el tema de “la nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana”.
    Comenta que ya antes hubo un Año de la fe, convocado por SS Paulo VI en 1967, al terminar el Concilio Vaticano II, y afirma que los contenidos de la fe “tienen necesidad de ser confirmados, comprendidos y profundizados de manera siempre nueva”.
     
  5. Dice que Paulo VI convocó a aquel Año de la fe para promover la profesión de la fe verdadera y su recta interpretación, y dice que convocarlo ahora permitirá releer de manera apropiada los textos del Concilio para que puedan “llegar a ser cada vez más una gran fuerza para la renovación siempre necesaria de la Iglesia”.
     
  6. Hace notar que “la renovación de la Iglesia pasa también a través del testimonio ofrecido por la vida de los creyentes”.
    Cita la Constitución Dogmática Lumen gentium, que afirma que Cristo no cometió pecado, pero Su Iglesia, que abraza a los pecadores, “es a la vez santa y siempre necesitada de purificación, y busca sin cesar la conversión y la renovación”. Dice que en ese sentido, el Año de la fe “es una invitación a una auténtica y renovada conversión al Señor, único Salvador del mundo.
    Dice que Dios “ha revelado en plenitud el Amor que salva y llama a los hombres a la conversión de vida mediante la remisión de los pecados”, y que “este Amor lleva al hombre a una nueva vida.”
     
  7. El Papa expone que “con su amor, Jesucristo atrae hacia sí a los hombres de cada generación: en todo tiempo, convoca a la Iglesia y le confía el anuncio del Evangelio, con un mandato que es siempre nuevo”.  Y te invita Benedicto XVI a “redescubrir la alegría de creer y volver a encontrar el entusiasmo de comunicar la fe”.  

Continuará...

Reflexiona y comparte:

¿Qué quiere expresar el Papa cuando habla de la necesidad de ‘rescatar a los hombres del desierto’?


“Cuando la Palabra de Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma...(se emprende) un camino que dura toda la vida. Éste empieza con el bautismo (cf Rm 6,4), con el que podemos llamar a Dios con el nombre de Padre, y se concluye con el paso de la muerte a la vida eterna, fruto de la resurrección del Señor Jesús que, con el don del Espíritu Santo, ha querido unir en su misma gloria a cuantos creen en Él (cf Jn 17, 22)...” Benedicto XVI (Carta Apostólica ‘Porta Fidei’ #1).

Pregunta del Catecismo:

¿Por qué late en el hombre el deseo de Dios?

Respuesta del Catecismo:

Porque Dios mismo, al crear al hombre a Su propia imagen, inscribió en el corazón de éste el deseo de verlo. Aunque el hombre a menudo ignore tal deseo, Dios no cesa de atraerlo hacia Sí, para que viva y encuentre en Él aquella plenitud de verdad y felicidad a la que aspira sin descanso.” (Compendio CIC, #2)

Lo dijo el Papa:

“Cuando la Palabra de Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma...(se emprende) un camino que dura toda la vida. Éste empieza con el bautismo (cf Rm 6,4), con el que podemos llamar a Dios con el nombre de Padre, y se concluye con el paso de la muerte a la vida eterna, fruto de la resurrección del Señor Jesús que, con el don del Espíritu Santo, ha querido unir en su misma gloria a cuantos creen en Él (cf Jn 17, 22)...” Benedicto XVI (Carta Apostólica ‘Porta Fidei’ #1).

*Publicado el domingo 21 de octubre de 2012 en 'Desde la Fe', Semanario de la Arquidiócesis de México.
También en la pag web de 'Desde la Fe' (www.desdelafe.mx) y en la del Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (www.siame.com.mx).