7 consejos para decir a los niños la verdad sobre santa Claus y los Reyes Magos

Alejandra María Sosa Elízaga*

A raíz del artículo “Nada más y nada menos que Navidad”, publicado el 19 de diciembre, algunos lectores escribieron para decir que estaban de acuerdo en que había que decir a los niños la verdad sobre santa Claus y los Reyes Magos, pero que no sabían cómo hacerlo, que les daba miedo traumarlos o que se armara un dramón.

En respuesta a sus inquietudes, he aquí 7 consejos:

1. Hay que elegir un momento en que los niños estén tranquilos y receptivos.

2. Si tienes varios niños no les digas a todos al mismo tiempo, habla con cada uno en privado, para atender sus dudas y que los otros no interfieran o le influyan con sus reacciones.

3. Toma muy en cuenta que a los niños lo que les importa es recibir regalos en Navidad, no tanto que vengan santa Claus o los Reyes Magos. Les daría lo mismo si les dijeran q santa Claus suele enviar a su esposa o que vienen unos sobrinos de los Reyes Magos. Lo que les ilusiona es recibir regalos, no quién los trae.

Por ello, al hablar con los niños lo primero que hay que dejarles muy claro es que van a seguir recibiendo regalos, como siempre, en Navidad y en Reyes.

4. Algo que a los niños suele hacerles sentir muy bien es que se les considere maduros, que no se les trate como ‘chiquitos’, así que se les puede decir es que se les va a revelar un secreto que sólo los grandes saben, pues ellos ya están listos para saberlo. Captan que se les está permitiendo saber algo importante porque ya son niños ‘grandes’ que pueden entenderlo y no van a hacer berrinche como bebitos.

5. Es muy importante empezar mencionando a Dios, recordarles que Dios nos hizo, nos ama y nos da todo lo que tenemos, incluida la comida, la ropa, los juguetes, los útiles escolares, todo. Y que en su caso, es Dios el que ha dado a sus papás (abuelitos u otros familiares que se encargan de ellos), lo que tienen, su trabajo, su dinero, para que puedan comprarles regalos.

6. Para tener una idea de lo que pueden decir, he aquí un ejemplo:

“Ya ves que en Navidad y en Reyes recibes siempre regalos, y los vas a seguir recibiendo. Pues como ya no eres un bebé, creo que puedo decirte un gran secreto, si prometes no decirle a nadie. Es algo que sólo los grandes saben, pero creo que ya puedes saberlo. Es algo muy bonito para que sepas a quién agradecer todos los regalos que has recibido y los que vas a recibir.

¡Es el Niño Dios el que nos lo ha dado todo! Es gracias a Él que tú has tenido y seguirás teniendo regalos en Navidad y en Reyes, porque Él nos ha dado la vida y la salud y el trabajo y el dinero para poder comprar lo que necesitamos y también otras cosas, como los regalos de Navidad y de Reyes.

Dijimos que era santa Claus porque nos pareció que podía ser divertido, pero ya eres más grande y puedes saber el secreto: realmente es el Niño Dios el que te dio y te seguirá dando los regalos en Navidad. Y también es gracias a Él que hay regalos en el día de los Reyes Magos. Ellos sí existieron, pero no vienen en persona, si quieres luego te cuento su historia, viene en la Biblia y es preciosa. Ellos están ahora en el Cielo con Dios y Él permite que nos ayuden con su oración y nos inspiren a ser buenos y generosos como ellos para poder comprar regalos.

Por eso damos gracias a Dios que es tan bueno con nosotros. Él es realmente la razón para celebrar en Navidad y en Reyes. Su amor por nosotros es lo más importante, el mayor regalo.”

7. Si se les habla con tranquilidad, los niños lo asumen así también y ni lloran ni hacen drama. Tal vez hagan preguntas como: ‘¿y entonces a quién le debo escribir mi cartita?’, a lo que se les puede decir que la de Navidad al Niño Dios y la de Reyes, a los Reyes, pero sabiendo que es Dios el que les dará los regalos a través de ustedes.

¡Enhorabuena por decidirse a decir la verdad a sus niños! Cuenten con la ayuda del Espíritu Santo. Recuerden que Jesús lo envió para guiarnos a la verdad (ver Jn 14, 16-17;16, 13).

Publicado el domingo 2 de enero de 2022 en la pag web y de facebook de Ediciones 72 (en Desde la Fe apareció sólo en redes porque en lugar de revista se publicó el calendario anual).